El Sábado casi totalmente reagrupados bajamos las trincheras Talibanes (Castillo de Castro para los nativos) Paco se reencontó con sus queridos dominios y en conjunto bajada a la carta para que cada cual se lo monte como quiera. Persiguiendo a Naxo me lo pasé muy bien ya que por una vez no se me escapaba ( jugaba yo en casa) quedando un video con buen resultado. En la pista división de opiniones.- los bielas se fueron a casita de madera en semoviente, los intermedios nos fuimos a bajar la senda de la orilla de enfrente (no confundir con la acera) y los sensatos se fueron al bar.
Lunes San Vicente no apto para cardiacos en la Catedral de la Técnica, digase PASAMÁ; los riders nos calentamos en el Nido celebrando la realización del recto sin mácula y con mucho estilo. La bajada del Pasamá deparó grandes momentos de concentración y no hubo ni una risita hasta que
llegamos a la carretera. La tensión facial daba paso en cada tramo superado a una momentanea relajacion de los glúteos. Se estudiaba cada milimetro del recorrido antes de dar un paso. La visión aerea fue una constante en cada curva y afortunadamente, cosa rara en esa senda, no hubo ningun incidente negativo. Los asistentes vamos a comercializar la adrenalina sobrante; realmente espectacular y bonita, de las que acabas satisfecho, aunque continua siendo una leyenda.... LA CATEDRAL de las sendas Técnicas.