Crónicas del Rider.- Tres eran tres.

Se presentaba un Sábado algo soso pero a ultima hora del Viernes Chechu me llamaba para la salidita semanal; Paco me decía con anterioridad que él y Carlos se iban de pedaleo con los Rally-Track. Como eramos pocos nos pusimos pronto de acuerdo con lo que a las 8:30 ya estabamos cargando y caminito de Cantallops para hacer el cementerio de Alfondeguilla; como el Viernes llovío el terreno estaba de orgía y las rocas secas, por lo que la bajada, de tirón, fue una suma de agradables sensaciones, si cabe un poco más que de costumbre; hice una pequeña recostada en la losa de la nueva trazada de las chumberas sin mayores consecuencias; de ahi no subimos a Pipa y bajamos las curvitas con prolongación en los toboganes hasta salir al rio; otra pasada de senda que disfrutamos a tope, cerito incluido del que suscribe; Chechu apretandome de cuentas y nuevamente de tirón hasta abajo. Paradita para almorzar en Ximo de Alfondeguilla con rapidez, calidad y precio y de allí nos fuimos al muro de la Vall desde donde nos descolgamos por las curvitas hasta el collado de Aigüalit para enlazar con la del mismo nombre y salir al ambulatorio de Vall de Uxó; esa última fue un descenso a toda mecha con un suelo noble del que abusamos como gorrinos con un agarre de escandalo; en las curvitas Chechu hizo una nueva trazada enlazando dos niveles sin pasar por la curva (pequeña recostada) Enfín una verbena de bajaditas y bajadones que con tiempo de sobras que finalizamos celebrando con un refrigerio en un bareto de la Vall. Fundamental la media hora ganada al inicio.